El cambio de estación hace que las temperaturas desciendan. Ese cambio entre la temperatura externa (medio ambiente) e interna (organismo) hace que disminuyan nuestras defensas y nos volvamos más propensos a enfermedades de tipo respiratorio.
Las bajas temperaturas del país pueden afectar nuestra salud, sobre todo en las regiones donde se registran heladas y friaje, volviendo a los pobladores vulnerables a infecciones respiratorias agudas (IRAS) que pueden complicarse con la neumonía.
Entre los más afectados están los niños menores de 5 años, los adultos mayores, las gestantes, las personas con enfermedades crónicas y aquellas que viven a 3500 mts sobre el nivel del mar. Por tal, la Lic. Nora Bueno, enfermera y docente de la Universidad de Ciencias y Humanidades (UCH), da tips para evitar las enfermedades respiratorias:
Lo primero es realizar prácticas saludables, como la actividad física y una alimentación saludable rica en hierro, presente en el hígado, bazo, carnes, sangrecita o pescado. Además, tomar bastante líquido.
Las Vitaminas A y C también ayudan a reforzar el sistema inmunológico y a prevenir enfermedades respiratorias, ya que contienen propiedades antioxidantes. Algunos alimentos ricos en vitamina A y C: pimientos, calabaza, zanahoria, naranja, kiwi y limón.
Hervir el agua antes de consumirla y almacenar de manera segura. Lavarse las manos con agua y jabón, antes de comer, antes de preparar los alimentos, después de cambiar pañales y después de ir al baño.
La licenciada Nora Bueno de la Facultad de Ciencias de la Salud de la UCH recomienda; además, ventilar e iluminar con luz natural todos los ambientes (casa, oficina, transporte público, entre otros).
Lo principal, señala la enfermera, es acudir a los establecimientos de Salud más cercanos a sus casas para vacunarse contra la influenza estacional, principalmente a la población más vulnerable, niños menores de 5 años y adultos mayores.